sábado, 3 de octubre de 2009

SOS DE OTRO METAL

(a Rahim, un obrero especial)
primera sonrisa con dientes
primera mano en mi mano
primer descuido del invierno
vocecilla que se enrosca
como venas de caramelo en mi cuello
carcajada perdida en tu boca
resonando con tíldes
sobre el anuncio gris de mi espalda
c'est quoi ton nom?
tu corazón columpiando el peso de tus débiles años
con fuerza hasta el doblo definitivo de mis codos
tu corazón de esponja secándote los últimos rastros
detrás de unas jabas de manzanas importadas
va tu corazón
en silencio sin sílabas
rodando
al sur soleado de tus pies distantemente amarrados
desgranando saltos
despertando mi presencia estrenada
resumidas básicamente en mi espalda
va tu corazón de puño con uñas masticadas
terminando de palpitar en mi presencia mal ubicada ada ada
nous sommes la meilleur équipe mon chum
te voy nombrando como descascarando un huevo
con sumo cuidado y en un plan de...serio
eres la primera mano peluda enterrándose en mis hombros
el primer navegante con visera
partiendo
cada mañana cada tarde
desde el puerto insondable de tu variada soledad
crecida en aguas sobre mi tardanza
hacia el enjuague de la palabra naufragio
girando rodeando el azul light de tu impajaritable inocencia
que esta vez no tiene nada que ver con pajaritos
o lo que es lo mismo
te pones a jugar todo el bendito día
cada mañana
un cuento físico de cada tarde
y una noche que baja raspando con descuentos
sobre nosotros
t'es le meilleur!!! de la planete bleue!!!
ruidos líquidos se despojan de ti y de tu boca
políglotamente y a borbotones
torciéndome el acento y los cereales
pero te quiero más que un trabado acento
más que un mostrador o un cuchillo o unas pencas de sandía
te quiero sobre todo desbaratado en odios
y cuando el estómago me va mal
más que a una palabra herida
más que la palabra ternura a medio brotar
hey mike je m'en câlice this work
el tiempo nos cruza maleable
y la complicidad repartiéndose en nuestros dedos
sobre uvas muertas que revivimos en nuestras bocas
o fresas soñando ser frambuesas en nuestras lenguas
y la risa y la palmada y el eructo y el sentirnos rufianes de congeladores
bajo un tiempo que se recuesta incendiado sobre tu vida
con la dulzura de tus malaspalabras despuntándote los codos
la rebeldía animada cerrándote los dedos de full arena
spiderman en tu polo sujetándote los hombros
tu sonrisa infinita con los ojos volados sonando en tu nombre
en tu nombre de hombre de 34 años y con pruebas
de barba hundidas a destiempo
eres de otro mineral
de otro mineral
puro barato primario umbilical

1 comentario:

Pablo Copola dijo...

Me sentiría profundamente orgulloso si algún amigo me escribiera algo así. Se palpa el sentimiento latiendo.
Saludos y sonrisas de vuelta :)